El pasado 24 y 25 de junio, se reunieron 200 víctimas del conflicto armado en este primer encuentro con delegados del Gobierno Nacional y del ELN, reafirmando la necesidad de un cese bilateral del fuego e instando a seguir discutiendo los mecanismos de participación de la ciudadanía.
En el hotel Grand Park, ubicado en el centro de la capital, se llevó a cabo los días 24 y 25 de junio un encuentro clave del proceso de diálogo entre el Gobierno Nacional y el ELN. Se reunieron cerca de 200 víctimas del conflicto armado en Colombia con el objetivo de expresar sus opiniones de cara al proceso de participación de la sociedad civil en la Mesa de Dialogo y dar forma al cuarto punto de la agenda pactada en México.
En este espacio, se logró fomentar el diálogo y la escucha a las víctimas del conflicto armado y así como reflexionar acerca de un modelo que garantice la consulta y participación de todos los sectores de la sociedad colombiana para la construcción de una paz nacional.
Voceros de la mesa reafirmaron en esta ocasión las reivindicaciones de los participantes al encuentro; más allá de reconocer los avances y logros, señalaron la importancia de seguir con las discusiones, haciendo énfasis en no detener los diálogos, es decir, “que no se paren de la mesa” , la necesidad de sostener el cese bilateral al fuego y la exigencia de garantizar los derechos fundamentales de las comunidades, quienes son las afectadas directas del conflicto y la incertidumbre en la que actualmente se encuentra el procesos de paz entre delegados del Gobierno y de ELN.
“Sin la participación de las víctimas no hay paz.”
Comunicado de las víctimas sobre el encuentro con la mesa de negociación gobierno-ELN
Este evento reafirma la importancia de contar con la participación de víctimas como sujeto activo, indispensable para diseñar los instrumentos de reparación individual y colectiva que se reflejan en el mejoramiento de la difícil situación de orden público y de afectación a la vida de las comunidades.Todavía falta un último encuentro para concluir el proceso de diálogo con el movimiento de víctimas.
En este espacio, en donde el 30% de los participantes fueron víctimas del ELN, se hizo un llamado para una paz total por parte de las víctimas, las cuales son conscientes de la complejidad y lentitud que estos procesos conllevan : “después de 60 años de guerra, no podemos pretender que de la noche a la mañana se va a solucionar”.